Ha llegado el momento de dejar de lamentarse y encarar el 2021 con renovadas fuerzas, pilas cargadas, y cómo no, una música nueva que nos saque una sonrisa. Os propongo un descubrimiento, un grupo, ¿qué digo grupo?, grupazo, de Buñol, que nos propone un nuevo sonido, y una nueva manera de encarar las letras, una nueva manera de percibir aquello que nos rodea, un nuevo comienzo, que viene de lejos pero eclosiona ahora…
Me refiero a Cornisa Panamá. Abre Youtube y dales cancha. El Colectivo Ravigotek te ama.
Pues fue el otro día, con unos amigos (menos de 5, ¿eh?) escuchando música en Youtube, no sé quién o cómo fue, que acabamos escuchando una canción de Cornisa Panamá, y dijimos «¡¡¡¿¿WTF!!!?!»…
Reconocí enseguida la voz de nuestro colega Robertote y empezamos a atar cabos: hay mucho movimiento en uno de los locales de ensayo, se oye tecno loco en la oscuridad de vez en cuando, entra y sale gente extraña, en las inmediaciones se respiran carcajadas, y el nexo, Roberto Matamales, siempre está por ahí…
No podíamos dejar de escuchar, canción tras canción, sin parar… Decidimos buscar algo de información, pero es escasa, y nos explotaba la cabeza, porque había un montonazo de canciones en Youtube, cada cual más hilarante, pero curradas… Nos recordaba un poco el espíritu de Lirios de Galvana, pero como más profesional, con la música muy bien hilada, y pinchada magistralmente por Álex Sierra, y cómo no, con muchas colaboraciones a las voces y a los coros. Concluyendo, tras su escucha: que te partes de risa y además está muy bien. Recomendable 100%.
Tras estas escuchas a ciegas, me pongo en contacto con Robertote para que me diga «la verdad» sobre este grupazo, y aparte de quedar para hacer una entrevista más concienzuda en un futuro próximo, aquí os dejo el contenido de sus sabias palabras para aquellas personas que quieran profundizar en la música de estos genios:
Es una idea que nace de la calenturienta mente de Roberto, pero todo el Colectivo Musical Rabigote colabora tanto activa como pasivamente. La música la lleva a cabo Alex Sierra, y la voz principal es Roberto.
Es algo que nace de la necesidad de que, con todo lo que ha pasado del Covid, no han podido sacar el equipo, hacer fiestas, pinchar música, que es a lo que se dedican los Ravigotek en tiempos normales, y se han dedicado a hacer canciones durante todo este tiempo.
Y sin más dilación, solo nos queda escuchar su arte, canciones como «La vida me quema», donde el techno más radical entronca con retazos estéticos de La Movida, pero con una letra más directa y sincera. Tenemos temáticas más sublimes y radicales como «Fóllame Satán», donde se derrochan efectos vocales como si de una piñata de ilusiones se tratara. «Todos somo yonkis, de una forma o de otra», reza «Fulera #0.7». En su «Basurilla Remix» encontramos las declaraciones más surrealistas posibles, entre chuletones de 25 kilos, granos… o estar hasta los huevos de tocar el trombón…
Sería de locos tratar de explicar con palabras objetivas, a priori, esta debacle de creatividad, y lo dejaremos para la entrevista que vendrá en breve… Mientras tanto, que no te pille sin haberlos escuchado. Mucha calidad.
Enrique Hernández Pérez
Músico desolado