La temporada 2018/2019 siempre será una muy especial en la carrera deportiva de Rodri Tarín. El de Chiva ha debutado este curso en Primera División, y ha dejado buenas impresiones a las órdenes de Mauricio Pellegrino en el Leganés. A falta de un partido para la conclusión, el central acumula 1338 minutos en las piernas.
Rodri Tarín tomó el pasado verano una decisión clave en su carrera deportiva. Después de varios años en la Masía, cambió de aires y apostó por el CD Leganés. El descenso del Barcelona B a Segunda B y la poca trascendencia de la cantera en los planes de Ernesto Valverde fueron dos argumentos sólidos para abandonar la lejana posibilidad de compartir en algún momento vestuario con Leo Messi, el futbolista que debería guiar esta temporada al Barça a un nuevo doblete. Los culés ya tienen LaLiga Santander en el bolsillo, y las apuestas de fútbol dan el favoritismo en la Copa del Rey a los que pudieron ser los compañeros de Tarín. ¿Las razones? Contar con el mencionado Messi en sus filas y ser los dominadores la competición, con cuatro coronas seguidas.
Seguidor del Valencia
Dada la antigua relación profesional de Tarín con el Barça, cualquiera puede pensar que irá en la final con los azulgranas, pero el caso es que el equipo de su corazón es el Valencia, el otro finalista y al que sigue cada vez que su agenda se lo permite. Formado en Paterna, emigró hasta Barcelona después de ocho años en el Valencia ante la proyección deportiva de un equipo que por entonces se nutría en gran medida del filial. ‘Xoto’ de cuna, Tarín se está haciendo un nombre en la élite gracias al Leganés de Pellegrino. En su primera campaña en LaLiga Santander, el zaguero no ha desentonado y acumula bastante rodaje. Eso se desprende de los números, con 1338 minutos disputados en la máxima categoría del fútbol español.
En total, Tarín, tras 37 jornadas disputadas, ha sido el duodécimo jugador más usado por el entrenador argentino, participando hasta en 17 encuentros del campeonato liguero. Y todo, pese a que en un principio se le iba a dar ficha del filial. Sin embargo, convenció en la pretemporada y ha rendido cuando le ha tocado jugar. Dicha regularidad es la que le ha brindado la posibilidad de marcar de cerca a delanteros de la calidad de Luis Suárez, Karim Benzema o Antonio Griezmann, entre otros. A sus 22 años, el de Chiva empieza a mostrar sus cualidades sobre el campo, unas que hacen de él un zaguero seguro en el juego aéreo y con buen manejo del balón con las dos piernas. Son virtudes que hacen de él un interesante comodín para Pellegrino al poder actuar en cualquiera de las dos posiciones de central, así como de lateral derecho. Y dada la escasez de defensores en España, tal vez entre, no dentro de mucho, en los planes de Luis Enrique para la Selección.
Primero, eso sí, el chivano debe asentarse en el once del conjunto madrileño. Ya después se puede pensar en cotas mayores como recibir la llamada de Luis Enrique o vestir la camiseta ‘ché’ en Primera División. De momento, ha cumplido con creces en su primer año en LaLiga Santander. Y es que vivió desde el banquillo, por ejemplo, la última derrota ante el Espanyol.
