La práctica deportiva y sus beneficios en la productividad laboral

deporte trabajo

Son varios los factores sobre los que se sustenta la afirmación de que la práctica deportiva consigue mejorar el rendimiento y la productividad laboral. La primera de ellas es que el ejercicio influye de forma muy positiva sobre las emociones al hacer que el individuo segregue endorfinas y, de esta forma, aumente su sensación de bienestar y placer. Asimismo, llevar a cabo actividades físicas de forma disciplinada consigue un fortalecimiento de la voluntad y establece hábitos muy útiles aplicables en el entorno de trabajo. De hecho, cada vez es más frecuente que las empresas integren este tipo de prácticas entre sus actividades diarias ya que, según recientes estudios, de esta forma consiguen reducir más del 30% de bajas por enfermedades físicas y metales.

Además, puesto que el deporte mejora la condición física y permite aumentar la sensación de bienestar, las habilidades mentales también se ven potenciadas. Por tanto, puede decirse con total seguridad que las empresas que dedican una sala a instalar equipos de gimnasia realizan una inversión rentable y fácilmente amortizable mediante un aumento de la productividad y una mejora del clima laboral que, por si fuese poco, repercutirá en reducir las tasas de absentismo. De igual forma, tampoco hay que olvidar que los empleados suelen mostrarse motivados y agradecidos ante este tipo de iniciativas.

Por si fuese poco, está demostrado que la actividad física diaria también ayuda a liberar las tensiones y el estrés, a despejar la mente y, de esta manera, ser más creativos en el trabajo y tomar decisiones más acertadas. Esto es aplicable a todos los entornos laborales y resulta especialmente importante en el caso de los emprendedores. Y es que, si eres uno de ellos, probablemente sepas la relevancia que tiene cada decisión que tomas así como la necesidad evidente de despejar la mente para solucionar los muchos problemas que, a buen seguro, tienes que afrontar cada día.

En este sentido puede ser que, tras una larga jornada laboral, sientas que no tienes la energía suficiente como para afrontar una sesión de ejercicio físico. Esto es absolutamente normal pues tu cuerpo, tras un día de estrés, te pida descansar lo máximo posible. Sin embargo, hacer deporte es de vital importancia y que, si incluyes este hábito en tu vida, rápidamente tu organismo se acostumbrará. De todas formas, es aconsejable acompañar tu dieta con suplementos deportivos que te aporten esa ayuda extra que necesitas para implementar esta saludable actividad a tu vida cotidiana según nos recomiendan desde www.HSNstore.com

En definitiva, hacer ejercicio físico te ayudará a mejorar tu productividad laboral y la de tus empleados si es que los tienes. Así que no le des más vueltas y empieza a acudir al gimnasio, a salir a correr, a montar en bici o a nadar a la piscina todos los días; no tardarás en encontrarte mejor, con la cabeza más fresca y con más energía para afrontar tus desafíos profesionales. Seguro que, a estas alturas, ya estás convencido de que hacer ejercicio físico es fundamental para encontrarte sano y en plena forma.

Javier Gázquez.
Experto en marketing ‘on line’.
Fundador de la web ‘blogtimista

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