Las nuevas líneas instaladas en Buñol se utilizarán para el despiece de vacuno, el vacío y el procesado de algunos productos elaborados que hasta ahora se desarrollaban total o parcialmente en Cheste.
Las nuevas líneas instaladas en Buñol se utilizarán para el despiece de vacuno, el vacío y el procesado de algunos productos elaborados que hasta ahora se desarrollaban total o parcialmente en Cheste. «Se consolida de este modo un gran área de elaboración junto a la sala de sacrificios de vacuno. La reorganización de espacios supone también un ahorro logístico en transporte y más eficiencia que repercutirá en precios más competitivos», señaló Francisco Garrigues, consejero delegado de Martínez Loriente.
La práctica totalidad de la materia prima que utiliza Martínez Loriente es de origen y crianza nacional. En 2013 -último ejercicio cerrado-, procesó 118,8 millones de kilos de carne y aumentó el número de sacrificios de vacuno en sus instalaciones de Buñol en un 60%, hasta superar los 103.000 animales.
En los tres últimos años ha invertido 32 millones de euros en investigación e innovación, así como en la adquisición de equipamiento industrial avanzado. En 2013 la firma ya invirtió 10 millones en la renovación de sus plantas y la compra de la totalidad de la granja Bovinos de Valencia, que en la actualidad se destina a granja experiencial de vacuno.