Otra cosa igual no, pero ir a ver conciertos es algo que me apasiona de toda la vida, y aquí en Buñol ha habido grandes cosas, no solamente de la mano de artistas del pueblo, grupos de rock, de clásica, verbenas, cantautores, etc, sino esos conciertos de verano, de Ferias, de Bienal, que nos han traído a “forasteros” muy buenos y famosos, que entre algún caradura y algún abuso, recuerdo como parte imborrable de mi vida.
De los ochenta recuerdo poco, sé que estuve viendo al magnífico Caco Senante, y que vino Muluk el Hwa (“pa flipar”), la inamovible Alaska, Glutamato Ye-ye, Loonie Brooks, Miguel Rios, y muchos más, pero mi memoria de niño no da para detalles. En el 89 los Ronaldos en pleno apogeo y ¡pám!, a partir de aquí los recuerdos atenazan. Siniestro Total haciendo honor a su nombre tienen un accidente y son sustituidos por Seguridad Social, conmoción para algunos y alegría para otros, para miíconmoción. Dinamita “pa” los pollos, magníficos con sus coros en playback, pero ¿y lo que molaban? El concierto que me impresionó por su calidad extrema fue La Frontera, que además, en el auditorio parecía que iba a entrar John Wayne a caballo en cualquier momento.
Estos conciertos fueron grandiosos, pero a nivel popular hubo un antes y un después en el concierto de Mecano, el campo de futbol hasta la bandera, un fiestón masivo y la alegría conjunta de miles de personas por ver a “un grupazo” con todas las letras. Más adelante el fenómeno se repitió con Sabina y Serrat, increíble noche. Mientras tanto, en esa masa informe de años locos, van actuando en Buñol Rosario, Mónica Naranjo y más gente de los 40.
También nos atrevimos los buñoleros con los festivales, el Maldito Rock, que dejó estampas preciosas como un paseo de San Luis lleno de Punkis, Rockers, Heavis, y otras estéticas, mientras una banda toca el Himno Nacional en la puerta de la ermita, ilegal, pero contrastante. Tristemente no hubo valor para seguir. Aquí estuvo La Polla, Koma, EUKZ (en más de una ocasión), Barón Rojo…
Y llegó “la crisis” y el campo de futbol se quedó grande para Fito y los Fitipaldis y La Fuga, Def con Dos, O´Funkillo, Delincuentes, y se fue la música a la explanada, donde Los Inhumanos hicieron un espectáculo de ayer para 30 nostálgicos. “Annus horribilis”.
Cabe mencionar espectáculos de artistas más comerciales, difuntos artísticamente a día de hoy (es lo que tiene ser un producto sin alma), como Raúl o David Civera (que la deteeengan), conciertos de auditorio no se sabe muy bien si de “de pie” o de “sentaos”. El canto del loco revivió la esperanza de que el campo de futbol sí se puede llenar.
De aquí hasta hoy ya nos acordamos todos de lo que ha habido. Remarcaría el esfuerzo del Tomate Rock, que con muy poco presupuesto ha sabido contar con los músicos de aquí y ha traído grandes grupos como Poncho-K, La Pulquería, Crimentales, Sujeto-K y Ki Sap. Y hasta aquí mi castigada memoria de melómano. Nos vemos en los conciertos de estas ferias. Y larga vida al Rock and Roll.
In Memoriam a los Conciertos del Txerengueti.
Enrique Hernández Pérez
Músico multidisciplinar
