¿Secretos de la mente humana o aliados del marketing?

Los expertos en neuromarketing apuntan que nada como conocer la forma en que la mente humana procesa la información y hacer un correcto uso de tal conocimiento, para obtener mejores y más convincentes resultados en mercadología.

En este sentido, los investigadores de tan innovadora rama, se afanan en averiguar el modo en que sus preferencias innatas afectan a las decisiones que el ser humano toma. Las personas, irremediablemente, están dotadas de sesgos cognoscitivos y el marketing funciona a favor o en contra de tales sesgos.

Un análisis de los principales secretos de la mente humana, se hace imprescindible para saber cómo puede favorecer el mercadeo de una empresa.

Una parte del cerebro es primitiva

La amígdala es la encargada del control de las reacciones y emociones y su funcionamiento es mucho más ágil que el de la mente racional.

Por ello, es necesario que un cerebro emprendedor trate de inspirar una reacción visceral, poniendo especial énfasis en el modo en que se ven los productos ofertados al observarlos rápidamente. El truco está en prestar atención a las cosas que la gente ve primero. En concreto, al generar contenido online, hay que fijarse en qué sitios y títulos resultan atractivos y pueden leerse con facilidad. Las dropshipping webs son especialistas en hacer el estudio de su audiencia a través de su comportamiento, pues su principal objetivo es llegar al máximo de clientes potenciales posibles, y un contenido de calidad es la mejor forma de conseguirlo.

 

El cerebro adora las imágenes

La mente humana es capaz de procesar los estímulos visuales mucho antes que los escritos. No en vano, casi el 90% de la información que el cerebro humano recibe es visual, motivo por el cual recuerda más las imágenes.

Usar aquellas que sean especiales es la clave. La imaginación puede ser muy rentable.

Fascinación por el rostro humano

Recientes estudios apuntan a que la mente prefiere las imágenes de rostros humanos, debido a la necesidad innata del hombre tanto de identificar amenazas como de construir relaciones con rapidez. Desde el nacimiento, el cerebro humano se halla programado para reconocer y optar por las caras humanas.

Poner a las imágenes rostros de personas reales resulta primordial en los estudios de mercadeo. De la misma forma, está demostrado que utilizar modelos en mails y páginas web aumenta la atracción del cliente.

Los colores condicionan los sentimientos

La elección de un color no es una simple cuestión de gustos. Cada tonalidad genera una distinta respuesta en el cerebro, al punto que un altísimo porcentaje de nuestros sentimientos surgen tan solo por el color.

Es fundamental acertar con el color que utilizar en tu compañía, el cual ha de depender de la marca, posicionamiento y audiencia. Lo mejor, realizar diversas pruebas antes de tomar la decisión final.

Los nombres afectan a las reacciones

El comportamiento depende del nombre que reciba una cosa. Si a una ración de comida se la denomina doble en lugar de normal, habrá personas que coman menos.

Al dar nombre a un producto, hay que estudiar meticulosamente cómo las palabras pueden influenciar la actitud de quienes las lean o escuchen.

Necesidad de pertenencia

El ser humano desea, desde siempre, pertenecer a un grupo, como reminiscencia de cuando, en la era primitiva, formaba parte de la manada.

Javier Gázquez.
Experto en marketing ‘on line’.
Fundador de la web ‘blogtimista
‘.

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