Un año más se conmemora el día internacional de la mujer, y como ya viene ocurriendo desde los últimos años, siempre envuelto por una polémica u otra, este año son la prohibición de las concentraciones en Madrid, y las múltiples declaraciones criminalizando al movimiento feminista por parte de partidos de ideologías ultraderechistas, y medios de comunicación afines, que no solo ridiculizan las diferencias de género, sino que, además niegan la propia existencia de la violencia machista.
Ante esta jornada de reivindicación y lucha, convendría recordar que 45 mujeres fueron asesinadas, por el mero hecho de serlo, por la violencia machista el año pasado en España, dejando 26 menores huérfanos y familias destrozadas. Que la brecha salarial por razón de genero estaba en el 21,4 % a finales del 2020, viéndose un ascenso de hasta el 36%, por culpa de la pandemia, lo que complica la autonomía de las mujeres.
Por todas nosotras, por la diversidad, por la igualdad, por las que no han podido llegar y por las que están por llegar, por romper con los techos de cristal, porque nos queremos vivas, porque sin nosotras el mundo se para y porque unidas lo conseguiremos, este 8 de marzo, las mujeres volveremos a revindicar nuestros derechos, el estado de alarma no suspende el derecho de reunión y manifestación. Ha habido todo tipo de concentraciones en los últimos meses.
En cualquier caso, las concentraciones que pueda haber o no el 8M no las convoca Podemos ni ningún partido y aunque, estaremos junto a las compañeras apoyando su lucha, son los colectivos feministas, y las autoridades, las que valorarán si se pueden celebrar con seguridad o no, como se hace con cualquier convocatoria de movilización. La clave es que se hagan cumpliendo todas las medidas de seguridad sanitaria, con responsabilidad por los que asistan, y los que no, lo hagamos desde nuestras casas, saliendo a los balcones y ventanas, para poner pañuelos, banderas, pancartas, música, aplaudir y reivindicar el 8M desde los balcones.
La Lucha continua.