El propietario anterior de la cantera vinculado a la familia Cotino, «pretendía el cierre de la planta y el achatarramiento de la maquinara»
Los trabajadores de la cantera de Áridos Buñol, anteriormente SOINVAL, celebran el primer aniversario de la compra de la unidad productiva por parte del grupo EIFFAGE en el concurso de acreedores que ha permitido la continuidad de la actividad y el mantenimiento del empleo.
El propietario anterior de la cantera vinculado a la familia Cotino, «pretendía el cierre de la planta y el achatarramiento de la maquinara», tal y como ha confirmado el sindicato CCOO de Buñol.
Según el sindicato, «la decida actuación de los trabajadores que llegaron a constituir una Sociedad Anónima Laboral promovida por CCOO, detuvo la liquidación de la empresa hasta que se alcanzó un acuerdo con la multinacional francesa».