CAPÍTULO 1. EL FUNDADOR
Cuidar y acompañar, dos palabras que definen la esencia de una empresa que lleva más de 78 años y tres generaciones arraigada en la comarca de la Hoya de Buñol-Chiva.
Todo este tiempo manteniendo vivo el nombre del fundador, Ángel Cuenca, demuestra lo importante que es para esta familia-empresa su actividad. Y es que «Servicios Funerarios Ángel Cuenca» ha puesto siempre el acento en hacer fácil lo difícil. Y lo ha hecho con un trato cercano y cálido con todas las familias.
El que puso la semilla de este proyecto fue Ángel Cuenca San Bernabé, al que muchos aún recuerdan por sus dotes de negociación, su cercanía y afán emprendedor. Originario de Mira (Cuenca), emigró después de la Guerra Civil a Valencia, donde se casó con Cecilia Martín Cárcel y tuvo al primero de sus cuatro hijos, al que llamó Ángel.
En aquellos tiempos difíciles, Ángel Cuenca se encargó del cobro puerta a puerta de Seguros Finisterre, Compañía de Seguros Valenciana, exclusiva de decesos. Fue tal el desempeño de esta labor, que en poco tiempo y junto a la expansión nacional de Finisterre, los propietarios de la compañía le propusieron que se encargara de la zona del interior de Valencia que quedaba entre Cortes de Pallás y Chulilla. El día 7 de enero de 1946 llegó a Buñol para establecerse. A partir de ahí se inicia el vínculo entre Ángel Cuenca, también conocido como el «tío Finisterre» y la comarca de la Hoya de Buñol.
Para poder abarcar todo este territorio con los medios de transporte de la época necesitó de colaboradores por los diferentes pueblos, que le permitían dar respuesta ágil ante cualquier evento y tener una mayor penetración social en cada localidad.
Fue una persona emprendedora y con una capacidad socializadora y de liderazgo por encima de lo habitual. Comenzó a generar negocios alrededor de la pequeña cartera de seguros de decesos. El momento más álgido de esta trayectoria se dio con la inauguración de los grandes almacenes «Galerías CUMAR», donde se podía encontrar muebles, textil, electrodomésticos, zapatería, discos… o te podían hacer una póliza de seguros, contratar un servicio funerario o de taxi. Más tarde se abrió una sucursal de estas galerías llamada CUMAR-2. Todo este conglomerado empresarial fue construido con una visión cliente-centrista, es decir, poniendo la satisfacción del cliente en el centro.
En toda esta etapa fue clave el apoyo laboral de la familia Cuenca Martín al completo, tanto los hijos del matrimonio como sus cónyuges.
CAPÍTULO 2. SEGUNDA GENERACIÓN
Ángel Cuenca Martín, hijo mayor del matrimonio de Ángel y Cecilia, estuvo acompañando a su padre desde muy pequeño y, aunque no recibió formación reglada, tuvo la oportunidad de compartir aprendizaje con Don Eduardo Ruiz. A finales de los años 80 se llevó a cabo la transición de la segunda generación familiar, en la que cada una de las secciones del negocio se independizó, quedando repartido el Grupo en cuatro partes.
Ángel Cuenca y su esposa, Teresa Lacruz, consolidaron el negocio funerario y asegurador, que fue evolucionando, siendo la primera funeraria en tener un tanatorio en la comarca. Ellos mantuvieron la misma fórmula: los clientes están en el centro. Y conservaron esa cercanía y esa confianza que son el distintivo principal de la marca «Ángel Cuenca». En los inicios de esta fase se vuelve a repetir la fórmula de esfuerzo familiar, en la que el peso principal recae sobre el matrimonio, con el apoyo de sus hijos.
Con la entrada del nuevo milenio, Finisterre es adquirida por MAPFRE, por lo que se abre la posibilidad de comercializar seguros en ramos que hasta el momento no se tenía acceso. Este hecho, junto a la tendencia en aumento del uso de tanatorios, hace que el equipo de la funeraria y de la agencia de seguros requiera de la incorporación de más personas que han sido clave en la evolución del negocio.
Uno de los hitos principales es la construcción del tanatorio de Chiva en 2008. Unas modernas instalaciones que han ofrecido un diferencial de servicio a los habitantes de esta localidad. El concepto vital de Ángel Cuenca Martín es la entidad única de trabajo-familia-persona.
CAPÍTULO 3. TERCERA GENERACIÓN.
La transición entre la segunda y tercera generación se ha ido haciendo de forma progresiva durante los últimos años, todo apuntalado por un gran equipo profesional muy cohesionado.
Durante la etapa de transición se ha construido el tanatorio de Godelleta y se ha conseguido la gestión del tanatorio de Yátova. En la actualidad, en un entorno cambiante y de alta competitividad, la intención de la tercera generación es que se continúe con el compromiso de sus fundadores: buscar la calidad, mimar el detalle. Para ello, se puso en marcha hace un año el nuevo tanatorio en Buñol. Se hizo en un enclave estratégico para convertirse en el tanatorio de localidades como Siete Aguas, Macastre y Alborache.
También se puso en marcha el «Proyecto Cerca de Ti», que consiste en la apertura quincenal de la agencia de seguros en Yátova para acercarse a sus asegurados y facilitarles el contacto presencial. Y, por último, comenzó a implantarse el «Proyecto que Nadie se quede sin Despedirse». Tras observar que los medios tradicionales de comunicación no permiten que las personas conozcan el detalle de los sepelios, se ha trabajado en dotar de un sistema de comunicación mediante RRSS, web y una aplicación exclusiva que utilizan las empresas más importantes a nivel mundial, que permite enviar mensajes on-line, además de la creación de un libro de condolencias, con fotos, vídeos y dibujos que se quedan a disponibilidad de las familias para toda la vida.
En definitiva, con 78 años de historia, se puede decir que sigue intacta la voluntad de mejora continua de su fundador. Esta tercera generación tiene el propósito de conservar este legado, que pasa de padres a hijos y que perdura para poder seguir siendo la empresa en la que confíen las generaciones actuales y futuras.