Nos vamos de semana

Ya se acerca el 12 de Octubre y con esto la temporada de caza. Ya hemos pasado la media veda del conejo y las esperas nocturnas del jabalí. El 12 de Octubre sin duda es la fecha más esperada para la gran mayoría de cazadores. El frescor del monte, pasar una mañana única con tu amigo y compañero de caza (el perro), andar detrás de las perdices por la sierra, pasar frio y calor, terminar exhausto de andar por el monte y la gran mayoría de veces sin abatir una de ellas. La caza no es matar animales, es estar en el monte, ver el trabajo de los perros, la compañía de tus amigos, el andar por sitios que no va nadie que no sea cazador, la tranquilidad que se siente y los momentos tan emocionantes que te ofrece la caza. La caza es un sentimiento que solo puede entender un cazador. No hay palabras que pueda decir para que alguien entienda eso, porque eso se lleva dentro.

La Sociedad de Cazadores La Amistad de Buñol tiene unos 350 socios que practicamos la caza en sus diferentes modalidades (al conejo, a la perdiz, al jabalí, al tordo). Cada uno de nosotros practicamos una modalidad o varias de estas, en solitario o con amigos. Durante todo el año, La Sociedad de Cazadores realiza trabajos en todo el término de Buñol: arregla caminos, hace bebederos para la caza, siembra comida en tablas sacadas con nuestro tractor, limpia monte desbrozando, etc… Cuando llega Octubre, los trabajos se paran porque empieza la temporada de caza y la mente ya está pensando en la apertura de la veda general.

Durante el periodo de Veda General (octubre, noviembre y diciembre) son muy comunes las Semanas de Casera, donde las cuadrillas se juntan en una casica de monte y pasan entre 7 y 10 dias juntos con sus perros. Normalmente están formadas por entre 6 o 7 cazadores y el hatero. El hatero es la pieza indispensable en la Semana de Casera, ya que es el encargado de preparar las comidas y cenas de toda la semana. Las casas son antiguas, con pocos privilegios y en el medio del monte. Allí lo que menos te preocupa es la televisión, internet o el teléfono. Estás en el monte con tus amigos, disfrutando de lo que te gusta y no necesitas más. Los días de caza, pues a cazar. Si no se caza, pues vamos al hongo o a por leña. En fin, son días donde la amistad y la tertulia fluyen y los cazadores pasan momentos que no se olvidan en la vida.

Gabriel Ortiz García
Asoc. Cazadores La Amistad

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