Estudiar es cada vez más un lujo. Formarse adecuadamente es algo que se nos escapa de las manos cada vez más, debido al enorme esfuerzo económico que supone poder estudiar. Aquellos estudiantes que cuando están acabando el bachillerato sueñan con entrar en una buena facultad, poder pasar unos años aprendiendo todo lo que se puede aprender de una determinada carrera que adoran, piensan que no puede ser tan complicado cumplir ese sueño. Hasta que se enfrentan al tedioso momento de pagar la matrícula. Un momento decisivo en el que nos planteamos si podemos hacer frente al desembolso que supone o nuestro sueño debe quedarse así, solamente en un sueño.
El precio de formarse depende de la comunidad autónoma
Una opción que hasta el momento podía ayudar a muchos estudiantes a cumplir su sueño de poder acceder a la universidad que quieren es pedir una beca. De esta manera, algunos estudiantes resultaban exentos de pagar ninguna tasa dado que la beca la cubría y otros recibían una ayuda considerable para poder iniciar esa nueva etapa de su vida.
Pero el problema surge cuando la cuantía que se otorga por beca es cada vez menor y el precio de las matrículas es cada vez mayor. Además, el número de becarios aumenta de manera importante, aspecto que se puede atribuir a la situación de crisis que se vive, que hace que más personas cumplan los requisitos mínimos para poder solicitar una beca.
Más gente necesita ayuda y hay menos fondos para poder ayudar. En conclusión, un problema grave para poder tener jóvenes con una formación adecuada.
Además, el precio de las matriculas varía mucho en función de la comunidad autónoma en la que se estudie. Así, por ejemplo, Cataluña es la comunidad donde es más caro formarse, más incluso que en países como Holanda. Andalucía la matricula es tres veces más barata que en Cataluña donde se observan tasas de matriculación que doblan la media española, alcanzando valores en torno a los 2011 euros. Sin embargo, existen países donde la matriculación es gratuita como por ejemplo Grecia y otros donde los precios son mínimos como Francia (189 euros) o Alemania (200 euros).
Los recortes dejan las universidades con menos personal
Además del problema de la reducción del importe de las becas, hay que añadir que los recortes han provocado que el personal de las universidades se vea afectado. Muchas universidades no han podido reemplazar al personal que se jubila, quedando por tanto una menor cantidad de profesorado o personal investigador por universidad.
Los recortes dejan en mal estado a los estudiantes, tanto porque estudiar es cada vez mas inalcanzable, como porque el personal que perdura en las universidades es antiguo sin posibilidad de renovarse, lo que supone un paso atrás en la formación de los jóvenes españoles.
Javier Gázquez.
Experto en marketing ‘on line’.
Fundador de la web ‘blogtimista‘
