En el centro, la imagen de la polémica. A la izquierda, aclarada y a la derecha, oscurecida.
Es lo que tiene la sociedad global, es lo que tienen las redes sociales, un fenómeno atractivo de repente se convierte en viral y toda la sociedad del primer mundo hablando a la vez sobre un mismo tema, bastante superficial, pero también curioso. Una imagen, dos opiniones: el vestido es blanco y dorado o negro y azul.
La polémica empezó cuando una usuaria de Tumblr subió la foto con este texto: “Por favor ayudadme. ¿Este vestido es blanco y dorado o azul y negro? Mis amigos y yo no conseguimos ponernos de acuerdo y nos estamos volviendo locos”.
Es cierto que no hay ninguna duda cuando vemos el vestido original: es azul y negro, pero también es cierto que la polémica aparece al visualizar la imagen, esa foto en concreto que, por otro lado, no es muy fiel a la realidad (el fondo está completamente quemado).
¿Y cuál es la explicación? Hemos escuchado multitud de teorías, incluso que dependía del caracter de la persona (los de peor humor lo veían negro y azul), pero parece ser que es simplemente una ilusión óptica que nos provoca el cerebro, que intenta interpretar la imagen en función del fondo, la luz, la mala calidad de la imagen. Si nos concentramos más en el vestido, lo veremos más azul y si nos concentramos más en el fondo, lo veremos más claro.
Yo tengo que reconocer que lo veo blanco azulado y dorado y, como controlo algo el tema del Photosop, que es 100% objetivo, os voy a poner unas capturas de los colores que dicho programa de edición de imágenes capta.
Roman Originals, la empresa que puso a la venta el vestido más famoso del mundo (el azul y negro), ha decidido diseñar uno en blanco y dorado, que ha subastado en eBay para recaudar fondos para una organización caritativa británica (Comic Relief). Gran movimiento de marketing de la empresa, que, sin esperarlo, ha logrado que #TheDress sea ya historia de las redes sociales.