Ayer martes 17 de marzo varios investigadores confirmaron haber hallado los restos de Miguel de Cervantes y su esposa, Catalina de Salazar, en la iglesia del convento de las Trinitarias, en el Barrio de las letras de Madrid.
Según palabras del director del equipo investigador, el doctor Francisco Etxeberria, aunque no hay pruebas de ADN que lo confirmen, “no hay discrepancias” entre los arqueólogos e historiadores que durante casi un año han estado buscando los restos del escritor.
No se han practicado pruebas de ADN porque solo podrían contrastarse con las de una hermana del padre del escritor, cuyos restos están en un osario común de un convento de Alcalá de Henares. No hay evidencia científica, pero sí “una certeza histórica”.
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