Un esguince de tobillo es una distensión o alargamiento excesivo con o sin rotura de los ligamentos que se relacionan con la articulación del tobillo. Los más afectados son los ligamentos laterales externos (peroneoastragalino anterior, peroneoastragalino posterior y calcáneoperoneo).
¿Cuántos tipos hay?
- Grado I (Leve o moderado): ligera distensión, sin hematoma pero con leve inflamación. Se puede caminar con molestia y se soluciona con tratamiento fisioterápico en 1-2 semanas.
- Grado II (Moderado grave): distensión ligamentosa con rotura parcial, inmovilización de 48-72 horas, edema, inflamación y hematoma. Se puede caminar con bastante dificultad y se soluciona con tratamiento fisioterápico en aproximadamente 3 semanas.
- Grado III (grave): rotura de ligamentos. Amplio edema, inflamación… No se puede caminar, necesita tratamiento quirúrgico, inmovilización prolongada y rehabilitación durante 3-6 meses.
Tras conocer qué es y cómo se clasifica un esguince es importante remarcar que hay que acudir al médico siempre que nos torcemos un pie para averiguar el alcance de la lesión, porque dependiendo del grado será necesario un tratamiento u otro; aunque pensemos que no es nada, hay que descartar la afectación del hueso, muchas veces la inflamación camufla un grave problema. No os preocupéis por el yeso, muletas… hoy en día está demostrado que inmovilizar con escayola un esguince leve o moderado es un gran error (pese a que se sigue haciendo), ya que favorece la cronificación y lo convierte en repetitivo. Un buen vendaje funcional limita los movimientos que nuestro pie no necesita además de disminuir la inflamación y aumentar la propiocepción, por lo que nos permite realizar actividades que van a ser beneficiosas en nuestra recuperación: ejercicios, caminar… Por todo ello, no ayuda a disminuir el tiempo de lesión, pero debemos tener presente que es necesario disminuir la intensidad de la actividad, puesto que el tejido está dañado. No podemos salir a correr una maratón o jugar un partido de futbol.
En cuanto al tratamiento de un esguince grado I-II las primeras 48-72 horas es necesario el reposo, la aplicación de un vendaje compresivo, tener la pierna en alto y la crioterapia (hielo cada 2-3 horas en periodos de 10 minutos). Es preferible no tomar antiinflamatorios, porque la llegada de sustancias inflamatorias a la zona de lesión es lo que permite que se sustituya el tejido dañado por tejido nuevo y sano, y este tipo de medicamentos frenan este proceso. A partir del tercer día podemos comenzar el tratamiento fisioterápico: drenaje linfático y masaje de bombeo para disminuir la inflamación, terapia manual para corregir las posiciones articulares incorrectas, electroterapia para bajar el dolor, punción seca para relajar la musculatura contracturada, vendaje funcional para limitar el uso del ligamento afectado, ejercicios propioceptivos para mejorar la estabilidad del tobillo…todo ello adaptado según las necesidades de cada paciente.
¿Y en casa que puedo hacer?
- Continuar con el hielo, aunque disminuimos el número de veces al día según vamos mejorando.
- El pie sigue en alto en los momentos de reposo pero es importante no dejar de moverlo, mover los dedos de los pies hacia nosotros y alejarlos, flexionar rodillas… todos los movimientos de piernas son positivos.
- Ejercicios de estabilidad, ponernos de pie y cerrar los ojos, aguantar unos segundos a la pata coja…
- Baños de contraste acabando en agua fría cuando se retira el vendaje.
Es muy importante seguir las recomendaciones de un profesional porque nuestras lesiones siempre son diferentes y nunca vamos a tener la misma evolución que nuestro vecino. No debemos conformarnos con una inmovilización prolongada y ya está, hoy en día hay muchos medios y mucho trabajo para realizar en tu esguince, no te quedes con él para toda la vida por un mal tratamiento.
Regina Bori Zanón
Fisioterapeuta nº3834