«En España lo mejor es el pueblo(…) siempre ha sido lo mismo. En los trances duros, los señoritos invocan la patria y la venden…» señalaba en el 1937 Antonio Machado y en el 21 José Ortega escribía: «Empezando por la monarquía y siguiendo por la iglesia, ningún poder nacional ha pensado más que en sí mismo. ¿Cuándo ha latido el corazón, al fin y al cabo extranjero, de un monarca español o de la iglesia por los destinos hondamente nacionales? que se sepa jamás. Han hecho todo lo contrario…»
Raro es el Pueblo, País, Estado, Patria incluso, que no tenga su historia vertebrada por sucesos y desarrollos difíciles, definitorios, violentos, complejos… La historia de España nomás nos serviría de muestra para afirmarlo, y dentro de esta historia, podríamos buscar en los últimos 150 años para hacernos una idea o refrescar la que tuviésemos. Por fortuna encontraremos una bibliografía extensa… pero me gustaría señalar el último libro del hispanista inglés Paul Preston como un buen trabajo de síntesis para entrar en ello.
En este libro, Un pueblo traicionado, su autor, Paul Preston, como buen conocedor y amante de España pero en la distancia de investigador que le proporciona la historia como disciplina y el hecho de no ser español, nos retrata de manera ágil y sugerente los últimos 150 años de historia hispánica, describiendo un periodo violento, trufado de una radical incompetencia política, empapado en la corrupción… nada de lo que Preston cuenta nos es ajeno a quienes en este preciso momento estamos vivos y en España quizás hayamos tenido la suerte de haber vivido las últimas décadas menos violentas del periodo, pero desde luego hemos podido ver en primera fila la corrupción más chapucera y entristecedora de toda Europa, una incompetencia política digna de Pepe Gotera y Otilio y una fragmentación social, económica, territorial que se engarza a la perfección con los mimbres que nos unen al tiempo pasado.
Hay quien pensará que es un libro desalentador pero… conocer la historia, analizar el presente por duro o dificultoso que este pudiere ser o parecernos, más bien es algo estimulante: nos predispone desde el conocimiento a tener herramientas y perspectiva desde lo individual a lo colectivo, desde lo práctico a lo ético para ser los más benignos protagonistas de la historia que se construye cada día y en cada suceso u acontecer.
Y ya que estamos hablando de España, tema socorrido como no podría ser de otra manera, y de libros, señalaré dos bien recomendables y en cierta medida al hilo del primero: España ante sus fantasmas, de Giles Tremlett, periodista inglés y corresponsal largos años para la prensa británica, en el encontramos un retrato periodístico y en cierta medida antropológico de la España actual enlazado con su propia experiencia de vivir aquí y de ser ingles. Hay anécdotas muy metafóricas de la realidad española y hay miradas periodísticas que nos ayudaran sin duda a distanciarnos y tener cierta relatividad a la hora de entender lo que a fuer de ser cotidiano quizás no podamos ver con nitidez.
Y el último libro del trío: ¿Esto es España?, de Raphael Minder, que ha sido corresponsal en Madrid del New York Times en los últimos diez años y que en este «ensayo» nos ofrece una mirada con perspectiva de lo que ha sido el panorama político, social y económico con imparcialidad y critica. Una mirada «desinteresada» y sin los condicionantes propios de ser nativo.
En fin, tres títulos, tres propuestas, tres perspectivas foráneas que nos pueden aportar elementos para entender, si acaso, el laberinto de la historia, el laberinto de la actualidad, el rumbo de nuestra acción como agentes del presente y como generadores del futuro. Vale.
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