Tengo que agradecer este proyecto de cultura en forma de magazine mensual, en su número 100, pues nos ha dado oportunidad a personas como yo, amantes de Buñol, de su historia, de sus paisajes, en especial de sus crepúsculos… Y es que Buñol es literatura para mí.
Con fantasía o sin ella la revista nos ha dado una oportunidad muy grande para expresar el sentimiento común hacia el pueblo donde nacimos y moriremos.
Cómo se llama la revista lo dice todo: asiesBuñol. Pues sí, así es. Lleno de vida y de intrahistoria, algo mágico y quizás subterráneo, acuífero, diría, y nos envuelve y nos hace diferentes.
Así es Buñol, sí, como dice el cantante de los años sesenta. Mi Buñol querido, su castillo, su cementerio, su iglesia, sus charcos y fuentes, sus cielos rosáceos o morados, sus aves, sus vistas panorámicas, su música, sus gentes, en fin… Así es Buñol.
Os dejo mientras desde la Torre de Homenaje veo la tarde caer, lenta y machadiana, quizás también becqueriana, la Sierra Martés a lo lejos.
Un estornino rompe el silencio desde la Plaza de Armas.
Rafael Ferrús Iranzo
Buñol histórico