¡Estamos de celebración!
AsíesBuñol magazine llega a los 100 números. Una cifra que se traduce en 8 años de trabajo. Un trabajo incansable que ha sido común, que ha sido colectivo, para el que hemos contado con la ayuda y la colaboración de todo nuestro pueblo, de su tejido asociativo, cultural, comercial, deportivo, etc.
Y eso, al fin y al cabo, es lo que nos hace felices, que este proyecto que nació en 2015, auspiciado por Mateo Pérez, Virginia Bartolomé y Manolo Marzo –al que luego se incorporó Luis Vallés–, sea hoy un poco de todos.
Porque a lo largo de estos más de 8 años nuestra AsíesBuñol magazine ha ido creando comunidad. Estas páginas han sido y son escritas por casi un centenar de colaboradoras y colaboradores cuyo único «pecado» es su amor a Buñol.
A través de ellas y ellos hemos ido dando sentido al nombre de la revista. Al contar con personas provenientes de distintos ámbitos, tendencias, sensibilidades, colectivos… creemos que hemos conseguido nuestro objetivo: mostrar que así es Buñol.
Creo que –aunque las juntemos en nuestro logo– son tres palabras que, además de formar parte de la letra de nuestro himno, son el perfecto punto final a la explicación sobre qué tipo de pueblo somos en todos los sentidos. Y eso es lo que hemos querido plasmar en la revista número 100 de este mes de julio.
A través de distintas miradas, de distintas sensibilidades, les hemos pedido a nuestras colaboradoras y colaboradores que describieran cómo es ese Buñol para ellas y ellos. Ya sea el actual, el de antaño, el de su infancia, el del futuro… En definitiva, queríamos conocer, desde distintos puntos de vista, cómo es su pueblo.
Ah, hablábamos antes de trabajo colectivo. No se nos puede olvidar que AsíesBuñol magazine, como reza en su subtítulo, es una revista de ocio, cultura y comercio. Y es en este último apartado donde queremos detenernos. Desde el minuto uno en el que salió la revista a la calle hemos recibido el respaldo de más de 200 comercios, establecimientos y empresas que no nos han dejado caer en ningún momento, ni siquiera durante los dos años de pandemia. Ahí siguieron, apoyando el proyecto a pesar de las muchas dificultades que ellos mismos estaban atravesando. Por eso, esta celebración cobra todavía más importancia. Porque sin el tejido comercial de Buñol, el magazine mensual no hubiese sido posible. Desde aquí queremos hacer un reconocimiento especial a todos esos comercios, empresas y establecimientos que han creído en este proyecto desde el inicio. Habéis sido, sois y esperamos que sigáis siendo nuestro motor.
Mención especial también a las instituciones, en especial al Ayuntamiento de Buñol y a las concejalías de Comunicación y Cultura, también a los diferentes responsables que han ido pasando por ellas a lo largo de estos 8 años. Al final, un proyecto colectivo no es nada sin las instituciones que lo apoyan. Y, en este caso, desde aquí nuestro agradecimiento especial al consistorio, por tampoco dejarnos caer. Como decimos, este proyecto es un poco de todos, en mayor o menor medida.
Para finalizar, queremos agradecerte a ti, lectora y lector, tu fidelidad. Hemos logrado construir una legión de seguidoras y seguidores que cada inicio de mes se acercan hasta su comercio habitual a llevarse la revista a casa. Incluso ha habido comerciantes que nos han dicho que las tienen que dosificar porque, si no, se acaban todas el mismo día que las repartimos. Ha habido otras personas –muchas– que las coleccionan y nos piden que se las encuadernemos por años. A todas vosotras y vosotros, os dedicamos un enorme: «GRACIAS».
Al final, como decíamos al inicio de este editorial, el único objetivo de esta revista, de este magazine, es que quede constancia escrita de cómo era y cómo es nuestro pueblo, para que las generaciones venideras puedan revisar y revisitar nuestra historia, costumbres, cultura, etc; y tengan las bases para construir el cómo será.
Ese Buñol que todavía está por venir.
